Despedida
En un rictus sombrío/miraste fijamente
a través de mí/No encontraste nada familiar
Yo hablaba y no oías/Estabas muy lejos
en un lugar impreciso/Me supo extraña
la sequedad de tu presencia/No pregunté nada
pues me invadió el miedo/Ni tú lo dijiste
sólo balbuceaste un adiós/¡ y no quise ni pude oírte!
En un rictus sombrío/miraste fijamente
a través de mí/No encontraste nada familiar
Yo hablaba y no oías/Estabas muy lejos
en un lugar impreciso/Me supo extraña
la sequedad de tu presencia/No pregunté nada
pues me invadió el miedo/Ni tú lo dijiste
sólo balbuceaste un adiós/¡ y no quise ni pude oírte!
Ciudad de las cruces
Vivir la muerte/lividez que habitaen macabro desierto/Caminos sin volverCiudad de las cruces/Llantos sin eco
Maquila de muertas/
Pezones que penden cual colgijes/
en pechos de los bestias
De nuestro gobierno/la sordera es un hechoCasi quinientas el recuento/del crimen perfecto
La Cima del Monte Venus
Joven esperé desfallecida de placeres
Revoloteo de mariposas en la entraña
Ceñido tú a esta cautivada Mesalina
Rendido cual esclavo ante su diosa
Pero ayer renuncié a ser joven
Ser vieja es dejar de lado los sueños
Sin memoria de sensuales delicias
Desencanto de una estéril vida
Ni siquiera exististe,
repetiré con el viril aroma en la memoria
Eres a quien imagino/un nombre que repito
para no parecer loca me largo a los campos/
pasaré desapercibida a las piedras, las flores, a la hierba
Bajo un cielo cómplice plagado de nubes en borrega,
de pájaros y mariposas, de sentimientos en guerra…
Grito desde mi corazón para no ahogar el pecho herido
Odias las cimas y los montes/salvajes ambos en el tiempo
Estarás en destrucción encadenado a chamánico desvío
No conozco tu voz pero adivino,
mesura en el hablar, varonil pasión en la palabra,
volcado en letras, cataclismo de cadenas
¡Pero no existes habré de repetirme!
De mirar el embrujo de tus ojos,
seré esclava también y me precio de saber de libertades
El matiz violeta de Monte Venus/ha sido obra de mi ensueño
Tendré que despertar/Será más fácil, ayer dejé de ser joven
Ya sin premuras ni fragancias
Extrañando el aroma de tu sexo/arrebato que enajena
estaré a buen resguardo en el campo de los secretos
Ahora en la ciudad recuerdo que te imaginé…
Peggy Bonilla, periodista y escritora. Mexicana. Ha publicado Coloquio de Melancolías(1984) El cielo no es azul, (2005) y 7 Antologías: Violeta, Anaranjado, Verano, Azul Añil, Primavera, Ecos del Mar, y XV Encuentro internacional de Mujeres poetas en el país de las nubes. Es de la Agrupación de escritores Tirant Lo Blanc. Tallerista de la Universidad Autónoma de Baja California en Ensenada. Realizó el Video Documental “La Valentina, de Soldadera a Coronela”. Grabó el CD de poesía “Recuerdos y Olvidos”
