jueves, 27 de marzo de 2008

Norma Isela Ramirez Hernández

Esteril
Fluyen ríos de sangre
en las cavernas juveniles,
lozanas sonrisas
y frescos suspiros.

Ingresan semillas
flotando por millares:
dientes de león
rugiendo en la oscuridad.

Dulce ternura
entregada en esperanzas.
Lunas radiantes
piden su rojo botín

La tierra no es fértil
sus campos no florecen
su alma no genera
pequeños brotes de verdor

Bajo el cielo infinito
caudal de truenos
ecos sonoros
del sórdido reproche.

Ni tierra ni semilla.
¿Cuál de ellos
no tiene la vida,
cuál de ellos
lleva la muerte?

Más solo las lagrimas
son femeninas.
En ella recae
La falta del ánima

Los ríos rojos
fluyen cada luna nueva
más no así
los dientes de león
rugiendo el la oscuridad

Se han abandonado
las juveniles cavernas
se han marcado
con el estigma
de la esterilidad
por el rugir rabioso
del macho herido
que no acepta su falta
de virilidad.


ROCA

Roca endurecida al pasar de los años,
Caprichosa, sin forma ni sentido…
No hubo escultor que limitara su alcance.

Viviendo en silencio esparció su dureza,
Cambio los sinuosos perfiles femeninos
Altivos y orgullosas de si mismos.

No hubo radiante calor o acido quelante,
Ni venenos medicinales que detuvieran
Su arrogante crecimiento lento y cruel.

Una tormenta de cortantes brillos
Derrumbo su centro y sus confines…
El dolor se enraizó con mayor fuerza.

Incompleta, mutilada, con piel seca y marchita
Traicionada por mi propio ser que permitió
Brotar de los ríos blancos una roca maligna.

Horizontes erguidos que ya no existen,
Se llevaron con ellos mi esencia de mujer
Ya rota a los ojos de los hombres sin belleza ni destino…



NORMA ISELA RAMIREZ HERNANDEZ (Aurora Marina) Medico pediatra. Mexicana. Colaboración en revistas y periodicos locales. En el hospital, la enfermedad deja indefensos a nuestros pacientes y sus familiares por lo que intento reflejar el dolor de aquellas mujeres aquejadas por un problema medico y su choque con el estigma social y cultural que viven.