lunes, 24 de marzo de 2008

Marcela Paz Solo de Zaldivar Garay

Iracunda

Soy una subjetividad híbrida
Vena abierta
Originaria de la mapu
Húmeda de los vestigios de la greda
Tengo el útero partido
Horade alucinatoria y bestial
La imagen de mi vientre aguerrido
Pinte los artefactos corporales
Juzgue mi travesía fecunda
Alivianando mis pezones
Gratificante del ardor prenupcial
Inundada por la fauna
Abrí fetal los trazos lineales de las manos
Contraje mi puño
Ovillada en un lugar sin paraderos
Sin caminos
Supe desconocer la cuidad exacta
Embalando mi instalación onírica
Nada se parece a los paisajes vulgares de mi soledad
Practicante de la palabra
Sin pronombres
Cualquier color me sirve
Hundida en un cerebro damasco
Amarilla en una uña
Azul en mi boca
Violeta eternamente violeta abierta violeta
Índigo en mis pies
Verdes las palmas
Corazón de múltiples colores
Cascada infernal
Arrastra honesta a la homónima
Déjame respirar
Abrir los orificios nasales
Todos mis hoyos manualmente exhortados
Destetada
Subliminal y expuesta
Caliente
Fría
Temblor
Si me vine de un esperma apabullado
Controlo la porción amorfa del despliegue




Dispareunia.

Se ahoga en su propia piel
La mueca plástica

Mirar la cara de los dioses
Cuando me rasuro la axila

Estoy de pie llorando frente a la cara de Cristo
Crucificada en la rebelión de los senos
Como tantos hermanos incoloros

Lagrimea secreta como una perra desdentada
Esperando la muerte

Con tu epidermis en la entrepierna
Sangra
El parto amnésico con clítoris

Tengo miedo y te masturbo
El paraíso se asesina

Muchacho me besa la hembra
Y me abre tibia.



Marcela Paz Solo de Zaldivar Garay, nace en 1984 en la ciudad de Chillán, al Sur de Chile, ha participado en distintos talleres literarios como “Grupo Literario Ñuble”, “El Cangrejo Azul”. Actualmente es estudiante de Psicología en la Universidad ARCIS de Valparaíso.