martes, 1 de abril de 2008

Abelardo Leal

Flor lapidada

Como un vestido hecho jirones
cuelga de la tarde;
en la mañana una lluvia de ceguera
cayó sobre su cuerpo,
y desgajó su brillo;las voces la apedrearon
como una serpiente;
los ojos la destrozaron
como teas vivas;
la mariposa de sus labios
fue encarcelada;
la amapola de sus mejillas
fue astillada;
sus cabellos,
que destilaban sándalo,
no se levantan en el viento
dibujando aroma;
sus senos están cerrados;
su vientre danza a la noche;la brisa pregunta por su mirada
que no mira;
su rostro es un espejo de agua
donde se refleja el sol negro.
Ahora es silencio
y grito de justicia.
La ley es más oscura que la muerte.
El cielo es un averno.
En la fosa donde yace
no han echado tierra.
La patean las moscas
y las difamaciones.
Los buitres buscan sus entrañas.
La han condenado
por ser infiel a una promesa.
Por dar amor la han torturado.
A un pájaro no pueden cortarle las alas.
A una flor no pueden cubrirle su belleza.
Los lobos le han hincado sus dientes
y han dilatado su agonía
como una fiesta.
Lloran sus despojos,
mientras el crimen bebe vino
y sigue dictando sentencias
para ocultar su sangre.


Abelardo Leal Nacionalidad: colombiano
alealh@unal.edu.co Nació en Bucaramanga, Colombia, en 1982. Ha obtenido los premios de poesía Universidad Externado de Colombia y Ciro Mendía, y el premio internacional de relato María Agustina ( España). Autor de los libros Poemas